Juntas y orgullosas
Juntas y orgullosas
Tras el parón de 2020, el Orgullo vuelve para reafirmar el sentimiento de orgullo de las identidades y orientaciones sexuales y de género tradicionalmente marginadas y reprimidas. Pero también para reclamar la defensa de los derechos humanos de todas las personas. En este sentido, es importante destacar que, mientras en otras partes del país los avances del colectivo son una realidad, en nuestra región seguimos siendo el vagón de cola en materia LGTBI+. La Rioja no puede quedarse atrás y como sociedad tenemos que saldar una deuda histórica con el reconocimiento de la diversidad y de sus derechos. Ya no valen las excusas con las que el gobierno autonómico bloquea la Ley Trans de La Rioja desoyendo las peticiones de la Sociedad Civil. Es vital que vayamos todas a una si queremos avanzar en el reconocimiento de una sociedad diversa, aún más cuando todavía hay quienes dicen que no necesitamos reivindicar el Día del Orgullo. Además, hay que dejar de dividir la lucha feminista porque al fin y al cabo todas formamos un colectivo atravesado por todo tipo de discriminaciones. Nos une eso como nos une el hecho de que pertenecer a La Rioja nos hace inferiores a otras personas de España en cosas tan importantes como los derechos Trans o el cumplimiento de la Ley de interrupción voluntaria del embarazo. Motivos más que de sobra para luchar juntas