Ningún hombre es asesinado por ser hombre, una mujer sí
Ningún hombre es asesinado por ser hombre, una mujer sí
El verano es época, en general, alegre,
de vacacionar, de disfrutar de la piscina e
ir a pasear por el río Ebro para refrescarnos
con su brisa. Una época para soñar y hacer
planes de futuro. Sueños de futuro que en
el caso de Salwa terminaron cuando fue
asesinada en Logroño por su pareja. Salwa,
nuestra vecina, psicóloga, joven madre de
tres hijos, encontró en Logroño su hogar.
Tres menores que crecerán sin el amor,
consuelo y apoyo de su madre porque un
criminal, su padre, cercenó el futuro de su
madre.
Hacía trece años desde que la anterior víc-
tima riojana fue asesinada. Trece años en
los que como sociedad no hemos logrado
terminar con una de las manifestaciones
más claras de la desigualdad, subordinación
y lacra que amenaza a las mujeres, el ma-
chismo.
La violencia contra la mujer siempre nos
tendrá enfrente y también de quienes nie-
guen la realidad clara e inequívoca: que se
ejerce violencia contra las mujeres por serlo,
que se mata a las mujeres por el hecho de
ser mujeres. Ante esa realidad únicamen-
te puede haber una absoluta repulsa a los
discursos que pretenden minimizar este te-
rrible problema social que sufrimos y, como
sociedad, combatirlos.