El pasado viernes, la Plaza del Ayuntamiento reunió, una vez más, a cuantos quisieron congregarse para protestar con el silencio contra el terror. La convocatoria tenía como motivo protestar contra el último atentado de ETA que había costado la vida al ertzaina, Iñaki Totorica, en la noche anterior.

        José Musitu -alcalde en funciones- condenó “de manera contundente” esta muerte en su alocución inicial y recordó al ertzaina asesinado. “Su dedicación a la vida de los ciudadanos le ha convertido en una nueva víctima”.

        Musitu también apeló a la “sensatez contra los responsables de estos crímenes” y relacionó los altercados callejeros con el terrorismo: “cuando hablamos de ETA, hablamos también de los radicales”.

        Por último, José Musitu quiso “enviar un fuerte abrazo y nuestro sentimiento de dolor y de esperanza a los familiares y amigos de Iñaki Totorica, con nuestra confianza en el Estado de Derecho y en los cuerpos y fuerzas de seguridad”.
        A continuación, todos los congregados guardaron cinco minutos de silencio, que se rompió con un aplauso en memoria de Iñaki Totorica al final de la concentración.