El primer pleno ordinario de la recién inaugurada legislatura centró el debate en el convenio de permuta entre el Seminario y el Ayuntamiento de Logroño, que afecta a la denominada ‘Casa de los Jesuitas’. El concejal de Urbanismo, José Musitu, defendió el acuerdo, “por su interés para la ciudad”. Musitu recordó que el convenio de permuta “permite al Consistorio hacerse con un inmueble situado en la calle Hospital Viejo, que forma parte importante del proyecto de recuperación de la Judería, en el Casco Antiguo”.

El concejal socialista, Domingo Dorado, manifestó el rechazo de su grupo a la propuesta del equipo de Gobierno y lo argumentó en “el valor histórico y patrimonial consustancial con el edificio, que esconde uno de los tesoros más grandes de la ciudad: el ábside de la única iglesia románica de Logroño”. En parecidos términos se expresó el portavoz del grupo regionalista, Ángel Varea, quien apuntó como “un error, el hecho de perder la propiedad municipal de un edificio con una ubicación estratégica fundamental para la zona y su recuperación”.

Musitu, por su parte, aseguró que “el Ayuntamiento no se va a desprender de ningún ábside románico, que siempre ha sido propiedad de la iglesia de San Bartolomé y cuenta, por lo tanto, con la misma protección que el templo, la máxima recogida en el Plan General de Ordenación Urbana”. Ya en el turno de portavoces, el concejal popular Conrado Escobar, reiteró que la permuta –aprobada en el pleno- “es beneficiosa para la ciudad y un paso decisivo en la recuperación del centro histórico, con la puesta en valor de un rincón estratégico”.

        Avenida de Madrid

Antes de abordar la moción presentada por el grupo municipal socialista para crear un grupo de trabajo sobre el soterramiento del ferrocarril, el pleno dio el visto bueno a la recepción de las obras de Avenida de Madrid, realizadas por el Ministerio de Fomento. La vía pasa, por lo tanto, a tener carácter urbano.

Al abordar el último punto del orden del día –la moción presentada por el PSOE–, el alcalde de Logroño planteó a la oposición la creación de comisiones informativas monográficas sobre el desarrollo del proyecto de soterramiento del trazado del ferrocarril a su paso por la ciudad. Revuelta realizó este anuncio y defendió la participación ciudadana y de los grupos municipales, pero aseguró que no admitirá “la dilación del proyecto”, en referencia a la propuesta presentada por el grupo socialista. El portavoz del PSOE, Tomás Santos, justificó la creación del grupo de trabajo, “en la petición de los colectivos de la ciudad que creen que el proyecto se puede mejorar”. Ángel Varea, por su parte, apoyó la formación del grupo de trabajo “como un acto de higiene democrática, porque la ciudad somos todos”.

        Participación ciudadana

Revuelta defendió la participación ciudadana en el proyecto y aseguró “que se van a escuchar las opiniones de los grupos políticos y de los ciudadanos en las comisiones monográficas sobre los trabajos que se vayan realizando”, pero rechazó las obras que se prometen “sin rigor ni seriedad, no vamos a frivolizar sobre el proyecto, en el que vamos a continuar trabajando como hasta ahora, con igual firmeza, transparencia y participación”.