El Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Logroño crearán en el primer trimestre de 2004 una Comisión Mixta de Transferencias, que trabajará en el traspaso competencial de la Administración autonómica a la local. Ésta fue una de las principales determinaciones acordadas en la reunión convocada en el Ayuntamiento de Logroño para abordar los primeros pasos del Pacto Local y la descentralización administrativa, a la que asistieron el presidente del Ejecutivo riojano, Pedro Sanz; el alcalde, Julio Revuelta; el consejero de Administraciones Públicas, Alberto Bretón; y el concejal de Relaciones Institucionales y portavoz del equipo de Gobierno municipal, Conrado Escobar.

       
       
Según explicó el propio alcalde, “se trata de cumplir el compromiso electoral de dar un impulso al Pacto Local en los primeros cien días de este mandato” y apuntó que a pesar del carácter preparatorio de la reunión, se estableció “el planteamiento de salida para los trabajos de la Comisión, en el que se han previsto cinco materias principales: vivienda, urbanismo, turismo, empleo e infancia”. En su opinión, “son los temas en los que el Ayuntamiento está maduro; pensamos que estamos sobradamente preparados en algunas cuestiones, en las que pedimos el reconocimiento a nuestra mayoría de edad”.
En una segunda fase se comprenden otras materias en las que, dijo, “estamos perfectamente asentados” y citó, como ejemplo, determinadas áreas de los Servicios Sociales, “para las que habrá que analizar dotaciones económicas y recursos humanos y materiales”.
Por último citó otras competencias “que habrá que negociar a medida que se desarrolle el Pacto”; algo que llevará su tiempo.

Convenio de Capitalidad
En la reunión también se abordó la renovación del Convenio de Capitalidad entre Ayuntamiento y Gobierno regional, firmado por vez primera en 2001 y para el que se pretende estipular una vigencia de dos años. De nuevo, su formulación atenderá a proyectos concretos “algunos nuevos y otros con continuidad, como es el caso del soterramiento”.
Julio Revuelta no olvidó citar el desarrollo, paralelo a las actuaciones apuntadas, de la ratificación del Parlamento regional para la inclusión de Logroño en la Ley de Grandes Ciudades y la elaboración de la Ley de Capitalidad “en la que se recogerá la autonomía financiera local, cuestiones legales que den rango a materias como urbanismo y vivienda; o cuantificar los servicios que se prestan a la colectividad”.
Un proceso, el de la descentralización administrativa, considerado “necesario” por el presidente Sanz y citó como modelo el traspaso competencial de la Administración central a la autonómica. En este sentido destacó el valor de “la confianza” en la seguridad de que “es prioritario tener sensibilidad política y voluntad para confiar en que los ayuntamientos son perfectamente capaces de asumir las competencias”. Un proceso en el que defendió la independencia de los ayuntamientos con respecto a su financiación puesto que, recordó, “en el proceso a las comunidades autónomas se dieron una serie de tutelas sobre la financiación, se indicaba en qué debía usarse el dinero”; y refrendó su postura de que “los ayuntamientos deben tener capacidad decisoria para destinar recursos a lo que consideren más necesario”.
       
El caso de Logroño
El proceso de descentralización y desarrollo del Pacto Local, se realiza en nuestra región y en su capital de forma pionera. El organigrama administrativo está cambiando a gran velocidad, “construyendo un país con el cambio sustancial que supone romper centralidades y con la voluntad de descentralizar ahora nuestra región, dando a Logroño el peso específico que es lógico”, indicó Sanz, quien también apuntó que no es el momento de establecer un calendario para que el Ayuntamiento asuma las competencias. Si avanzó que “posiblemente algo se verá en 2004”, además de explicar que determinadas competencias no podrán cederse en su totalidad, ya que hay determinadas actuaciones que son propias al ámbito regional, como es el caso de la tutela de menores.
Para abordar todos estos asuntos se creará la ya citada comisión paritaria, con representación al 50 por ciento de cada una de las instituciones y que, por parte municipal, acogerá a los diferentes grupos políticos.