El pasado miércoles, el Ayuntamiento de Logroño, la sociedad Emaral y la comisión liquidadora de Carrocerías Ugarte, firmaron el convenio urbanístico que transforma el uso industrial existente en el antiguo solar de Carrocerías Ugarte por residencial. Un convenio realizado “en concordancia con la política municipal de reconvertir zonas industriales que por su ubicación dificultan el desarrollo urbano de diferentes zonas de la ciudad”, tal y como dijo el alcalde, Julio Revuelta. Así, el convenio refuerza esta idea, aplicada en este caso al barrio de Varea.
En cuanto a los detalles del convenio, éste otorga aprovechamientos urbanísticos al solar de 18.166 metros cuadrados. Tras proceder a los diversos sistemas de aplicación de coeficientes, se podrán construir 13.896,99 metros cuadrados destinados a vivienda libre (unas 120) y 8.538 a VPO (unas 85); 205 nuevas viviendas en total. El solar de viviendas libres será subastado según encomienda que la propiedad hace al Ayuntamiento de Logroño, con un precio de licitación de 7,5 millones de euros. Corresponderá al adquiriente el pago del IVA y costes de urbanización, mientras que la cantidad revertirá en los propietarios y en la comisión liquidadora para su reparto conforme a los acuerdos alcanzados. Por su parte, el Ayto se hará cargo de la promoción de 85 viviendas protegidas. Para ello se obtiene parte del solar por la cesión obligatoria (3.633 metros) y adquiere el resto; 4.904 metros cuadrados, por el precio de 783.000 euros. El objetivo: la construcción de la citada promoción de 85 viviendas protegidas.
Para el alcalde, el presente es “un buen convenio con cuatro aspectos destacables”: urbanísticos, en beneficio del barrio de Varea; de vivienda, con la ampliación de la oferta de la misma; “algo siempre bueno en un momento de carestía”; de interés municipal, “con la colaboración al Plan Municipal de Vivienda”; y “no menos importante”, dijo, “el motivo por el que nos sentamos a hablar y por el que se ha resuelto una situación no deseada por nadie, con problemas empresariales y para los trabajadores”. A partir de ahora se contabiliza un plazo de 4 meses desde la ratificación del Pleno para el pago de los 780.000 euros que tiene que abonar el Ayuntamiento; y 8 meses para la aprobación provisional de la modificación del Plan General; unos plazos que se esperan acortar. Según el alcalde, la modificación del Plan General podría estar definitivamente aprobada en 5 meses, a lo que seguirá la subasta de forma inmediata.