El alcalde de Logroño, Julio Revuelta, y el consejero de Obras Públicas y Vivienda, Antonino Burgos, visitaron el pasado martes las viviendas protegidas que el Instituto Riojano de la Vivienda (IRVI) ha promovido en el número 11 de la calle Herrerías, en pleno Casco Antiguo de la ciudad y en un solar enajenado por el Ayuntamiento. El Irvi trabaja sobre la previsión de que en la primavera del próximo año entregará los pisos a sus propietarios.
Los precios de las viviendas serán, de acuerdo con los datos ofrecidos por el consejero, de 70.000 a 96.000 euros, “y se podrá contar con las ayudas del Plan de Vivienda, tanto del Ministerio como de la Comunidad Autónoma, que llegan a financiar hasta un 30 por ciento del precio final”. Según dijo Burgos, “se trata de una actuación más del IRVI en Logroño y para los jóvenes, con 14 viviendas de entre 50 y 70 metros cuadrados, que se destinarán a personas con ingresos inferiores a 2,5 veces el salario mínimo interprofesional”.

       
Por su parte, el alcalde de Logroño recalcó que “es una prioridad construir vivienda en el Casco Antiguo, y vivienda atractiva, porque el objetivo final es que venga gente a vivir en este barrio” y apuntó que “estos pisos son un ejemplo de lo que se ha hecho y de lo que queda por hacer, como en el PERI Mercaderes que está justo enfrente de la actuación que hoy visitamos”.
Revuelta consideró que el proyecto para las 14 viviendas del IRVI “ha conseguido que los pisos en el Casco Antiguo tengan las mismas condiciones y sean igual de atractivas que en el resto de la ciudad, con su aparcamiento y con un patio hermosísimo, que es un lugar de relación para los que aquí vivan”.
En opinión del alcalde, actuaciones como ésta “demuestran que se puede vivir en el Casco Antiguo, en el corazón de la ciudad, con todas las comodidades que se encuentran en cualquier zona nueva. Por eso estoy especialmente contento con este proyecto del IRVI y con el esfuerzo que hace el Ayuntamiento para conseguir solares para hacer este tipo de actuaciones”.

La promoción
Se divide en dos bloques: el de la calle Herrerías, con dos viviendas, y las 12 restantes se agrupan en la calle Marqués de San Nicolás. Una docena de los pisos constan de dos dormitorios, salón, cocina y un baño, y los otros dos tienen un dormitorio, salón-cocina y un baño.
Todas las viviendas llevan vinculado un trastero de 8 metros cuadrados y a once de ellas también les corresponde una plaza de garaje de 25 metros cuadrados. Los compradores contarán, además, con ventajas de financiación: un 80 por ciento se financia con préstamos hipotecario a 20 años y el otro 20 por ciento se abona durante la construcción.