El pasado martes se reunieron los responsables de la Junta Local de Seguridad de Logroño, con el alcalde, Julio Revuelta; y el delegado del Gobierno en La Rioja, José Antonio Ulecia, a la cabeza. Los dos representantes coincidieron en el “dato objetivo” de que “Logroño es una de las ciudades más seguras de España”. Julio Revuelta explicó que “en cuestión de delitos Logroño está muy por debajo de la media nacional; algo que es una realidad gracias al trabajo realizado; lo que no quita para que nos detengamos en el análisis de determinados actos vandálicos que se han producido en los últimos meses en la ciudad, principalmente los fines de semana”. En referencia a esta situación, Revuelta mencionó que “se han detenido a los principales causantes de estos actos vandálicos” y destacó la intención municipal de seguir trabajando “en la prevención, en la corrección del delito, en la puesta a disposición judicial y también en la reparación de los daños efectuados”. Aspecto, este último, en el que señaló que el Ayuntamiento ya ha solicitado anteriormente responsabilidades (al margen de la correspondiente multa) con la pertinente reclamación de la cuantía de los daños materiales.
       
       Coordinación policial
       El alcalde destacó el objetivo expuesto de aprovechar al máximo los recursos disponibles, “intensificando el convenio entre Ayuntamiento y Ministerio de Interior, de 2003, para la coordinación policial y la potenciación de acciones conjuntas”. Algo que resultará de “especial utilidad” según el alcalde, que avanzó la creación de grupos de trabajo específicos, como por ejemplo centrados en el vandalismo, el tráfico de drogas, menores, etc.
       
       Los datos
       El delegado del Gobierno, José Antonio Ulecia, anunció la intención de mantener las reuniones cada dos meses. El objetivo, según Ulecia, es “garantizar la seguridad de los vecinos”, algo para lo que “se cuenta con los instrumentos y también con la voluntad”. Aportó datos: “Logroño cuenta con un índice de 37,74 delitos por cada 1.000 habitantes; siendo la media nacional de 54,88 delitos por 1.000 habitantes”.
        Anunció una mayor atención policial durante los fines de semana y la coordinación de Policía Local y Nacional. Habló sobre el vandalismo, señalando que de los últimos cinco casos, se han resulto cuatro, “con las correspondientes diligencias judiciales en los casos en los que ha sido posible”. También apoyó la idea expuesta de la responsabilidad patrimonial en el caso de que no la exista penal. Se exigirá a las familias el pago de los desperfectos causados por el vandalismo; aspecto también subrayado por el alcalde como una medida más, “al margen de las ayudas públicas que pudieran ofrecerse para que los jóvenes que cometan un delito no reincidan”.