El primer jueves de mes fue de Pleno en el Ayuntamiento de Logroño. Una sesión que contaba con el debate de la aprobación definitiva de la Ordenanza de Protección del Medio Ambiente contra la emisión de Ruidos y Vibraciones y que, finalmente, no se abordó por la ausencia de documentación jurídica al respecto. Al margen de dicho aspecto, que había suscitado la presencia de numerosos vecinos y que será abordado en siguientes sesiones, se aprobó (con los votos favorables de PP y PR y el voto negativo del PSOE) la modificación del Plan General en su determinación de suelo urbanizable no delimitado, lo que permite el avance de la programación urbanística de la ciudad en diferentes puntos del término municipal hasta completar nueve millones de metros cuadrados de suelo.

        * El debate
        Por parte del PSOE intervino Vicente Urquía, quien reprochó al equipo de Gobierno “dejar en manos privadas la construcción de la ciudad”. Habló el concejal de “un oligopolio establecido en Logroño que se beneficia de las enormes plusvalías generadas por esta modificación”. Una ampliación del terreno edificable que, a su juicio, “no tiene sentido cuando hay un 25 por ciento de viviendas vacías en Logroño”. Asimismo, utilizó el término “señuelo” en referencia a la construcción de viviendas protegidas anunciada por el Gobierno municipal, y destacó el aumento de la construcción de vivienda libre.
        José Musitu, concejal de Urbanismo (PP), fue el encargado de defender la modificación, resaltando la intención municipal de “flexibilizar” los criterios de desarrollo de suelo, “con la posibilidad de construir vivienda de protección oficial”. Defendió el concejal la no variación de “ni un solo metro cuadrado de suelo con respecto a la calificación inicial”; aspecto en el que redundó el alcalde, Julio Revuelta, quien reprochó al PSOE no haber acompañado ninguna modificación del Plan General, como la actual en la que, resumió, “permitirá construir tres viviendas de protección oficial donde antes se permitía construir una libre, siempre que los promotores así lo decidan”. Una modificación “que tiene en la ciudad y en los vecinos, que tendrán más facilidad para optar a una vivienda, a sus máximos beneficiarios”.
        Por su parte, el PR, en palabras de su portavoz, Ángel Varea, se mostró de acuerdo con la modificación al considerar “bueno” el modelo propuesto, en el que “lo importante es visualizar la ciudad dentro de unos años”. Entre los criterios a favor de la planificación, la consecución de más vivienda protegida y “la aparición de la clasificación de vivienda a medio camino entre la protección oficial y la vivienda libre”.

        * Otros asuntos
        Otro de los debates fue el de la aprobación definitiva de la propuesta municipal sobre la planificación de infraestructuras que, por unanimidad fue apoyada por los grupos municipales. Su planteamiento establece las comunicaciones que son consideradas necesarias para el desarrollo urbano de logroño, como las rondas y otras conexiones viarias previstas para los próximos años.
        El Pleno también aprobó dos modificaciones urbanísticas en el Casco Antiguo (calles Puente y Herrerías) con destino a la edificación de viviendas; el Gobierno municipal rechazó una moción socialista en la que se solicitaba el uso de la Casa Cuna como Guardería Municipal; otra para realizar mejoras en el cementerio; y también la proposición regionalista para instalar un ascensor en la pasarela que se va a construir en La Cava. En estos casos la justificación a la negativa residió en el momento de la ejecución de las medidas pertinentes o en el estudio para su viabilidad, bien por parte del proyectista, como en el caso de la pasarela; bien por parte del Gobierno y técnicos municipales, en el caso del uso de la Casa Cuna.