La conocida ermita logroñesa de El Cristo, en la carretera de El Cortijo, va a ser remodelada en los próximos meses. Así lo anunciaron el pasado martes el alcalde de Logroño, Julio Revuelta; y el consejero de Cultura, Luis Alegre, quienes advirtieron en este proyecto “una sensibilidad acorde a los valores emotivos que esta ermita tiene para muchos logroñeses”.
       
Según explicó el alcalde, se va a renovar y adecuar la cubierta, muy deteriorada tras el paso del tiempo. Es la principal necesidad, aunque no será la única actuación. La ermita, de fábrica de ladrillo, será rehabilitada en sus elementos dañados o desgastados, incluido el arco principal de la edificación.
Junto a estos trabajos, que incluirán pintura y saneamiento, el Ayuntamiento emprenderá una rehabilitación de la urbanización del entorno, que incluirá la renovación del pavimento, de la iluminación y del mobiliario urbano. Y otra mejora: dadas las numerosas peticiones, se construirán unos aseos públicos junto a la ermita.

La financiación de los trabajos correrá a cargo del Ayuntamiento y del Gobierno de La Rioja. La reforma de la ermita ascenderá en total a unos 120.000 euros. El Gobierno regional se encargará de reformar la ermita y el Ayuntamiento de la urbanización y los aseos públicos.
       
Inicio de los trabajos

El alcalde señaló que la justificación de una actuación de urgencia tiene dos motivos principales. El primero, el mal estado de la techumbre. El segundo, que las obras queden finalizadas para la Cuaresma, cuando es visitada por muchos vecinos y peregrinos. Alegre calificó a la ermita como “la pequeña Compostela a la que se asiste durante la Cuaresma y en constante goteo a lo largo de todo el año”, por lo que la previsión es que los trabajos comiencen en mes o mes y medio; con un plazo de ejecución de semejante duración.
       
Un poco de Historia. Según la crónica municipal, en el año 1974, la Iglesia concedió a la histórica Ermita el privilegio de ser “apta para poder ganar el Jubileo concedido por el Papa Pablo VI, en Año Santo, y atendidas las razones que en la misma se exponen de coincidir con el tercer centenario de dicha ermita, y ser la misma lugar piadoso de reconocida devoción y afluencia de fieles, especialmente por la ciudad de Logroño”. En cuanto a su aspecto, tal y como la conocemos hoy, la ermita fue restaurada en 1878 por parte de un recordado logroñés, de nombre Ayala, en un momento próximo a su derrumbe por su estado. En este momento se le añadió el pórtico que hoy la caracteriza como campanil. Su última remodelación data de 1975, cuando tuvo que realizarse una cuestación popular para la reparación de su techumbre. Han pasado 30 años y no han vuelto a realizarse reformas de conservación, por lo que ha llegado el momento, dado su deterioro, de emprender la anunciada remodelación.