Después de algo más de un año de obras, el paso inferior de conexión de las calles San Gregorio y San Francisco ha quedado oficialmente inaugurado, restableciendo el tráfico en las zonas afectadas por los trabajos y completando el último de los aspectos comprendidos en esta actuación desarrollada por el Ministerio de Fomento, a través de la Dirección General de Carreteras, en el entorno del Puente de Piedra.
        Para la ocasión, la ciudad volvió a contar con la presencia del secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, que en su visita a la zona destacó “la especial satisfacción que supone ver concluida una obra de medio urbano, presente en la vida cotidiana de los ciudadanos”.

        Una actuación que resuelve la dificultad del anterior paso a nivel que complicaba frecuentemente el tráfico en una de las principales entradas a Logroño y que para el alcalde, Julio Revuelta, supone “la finalización de una obra largamente prometida y esperada; una infraestructura muy necesaria para nuestra ciudad”. El alcalde subrayó la importancia de la misma, ya que “además de solucionar la situación del tráfico, ha cuidado mucho las conexiones peatonales con el Parque del Ebro, lo que supone una mayor calidad de vida para los ciudadanos”.
       
        Descongestión del tráfico
       
        La solución técnica adoptada ha consistido en la ejecución del paso inferior que hoy da continuidad a las calles San Gregorio y San Francisco, bajo la antigua N-111. A este nivel se ha construido una glorieta de 17 metros de diámetro, a través de la cual se desarrollan todos lo movimientos de conexión.
        En la construcción del paso inferior, resultó especialmente complicada la resolución del drenaje, siendo necesaria la instalación de un sistema de bombeo que permite controlar las oscilaciones del nivel del Ebro en el caso de que se registren crecidas.
        La urbanización de la zona ha sido cuidadosamente diseñada, introduciendo tratamientos diferenciados según las características del entorno. Así, se ha ejecutado nueva pavimentación, acondicionamiento de paseos, señalización vertical y horizontal, nueva iluminación y plantación de especies vegetales.
        El presupuesto de la obra fue inicialmente licitado en 500 millones de pesetas y aunque se contrató por 380 millones, la inversión final ha ascendido a 447 millones de pesetas. El aumento del presupuesto, al igual que sucedió con el plazo inicialmente establecido, se ha visto determinado por los restos arqueológicos aparecidos junto al Puente de Piedra y también por la crecida del Ebro en marzo de este año, que obligó a ralentizar el desarrollo de los trabajos.
        Con la finalización de la obra ha quedado totalmente reconducido el tráfico en la zona, articulando su desarrollo este-oeste y descongestionando otras zonas de la ciudad que se utilizaban como alternativa de circulación.
       
        Línea 1B, Las Norias-Lardero
       
        Otro aspecto destacable es el recorrido de la línea de autobús 1B, Lardero- Las Norias, que desde la apertura del paso inferior circulará por el Puente de Piedra y las calles San Francisco, Madre de Dios y Doce Ligero, tanto en los viajes de ida como de vuelta. También se reubica la parada junto al tanatorio, situada anteriormente en la calle San Francisco, para instalarse en la confluencia de las calles Capitán Gaona, Madre de Dios y San Francisco. Además, se suprime la parada ‘Constitución’ (Madre de Dios, número 9); así como la denominada ‘Hospital’, frente al Hospital de La Rioja.