El sábado pasado, Paz Villar, César Ortega y Ángel Sáinz Yangüela, concejales del Ayuntamiento de Logroño en representación del equipo de Gobierno municipal, visitaron la urbanización de la Plaza de la Libertad, en el barrio de Varea. No se trata de la inauguración oficial, que se celebrará con la llegada del buen tiempo, sino una visita que, en cierto modo, sí simboliza el final de los trabajos y la primera oportunidad para contemplar los resultados.
        Acompañados por algunos representantes de la Asociación vecinal del barrio, los concejales pudieron conocer de primera mano el resultado de unos trabajos que se han prolongado por espacio de siete meses y que han superado los 300.500 euros de inversión.
        La plaza, que estaba sin urbanizar, cuenta con una superficie de 3.300 metros cuadrados, de los que 397 se han dedicado a zona verde y 158 a una zona de juegos infantiles. El resto se ha dedicado a zona estancial, paso y accesos.
        Para permitir el tránsito hacia los garajes se han urbanizado bandas de pavimento con adoquín gris, para soportar esta circulación. El resto del pavimento es baldosa similar a la de otras zonas urbanizadas en el entorno. También se han realizado plantaciones, se ha instalado una fuente bebedera y el correspondiente mobiliario urbano.