El pasado día 22, antes de la Semana Santa, el Ayuntamiento de Logroño celebró un Pleno extraordinario para mostrar su “indignación y repulsa” ante “la brutalidad y el salvajismo terrorista” que un día antes acabó con la vida del concejal socialista en Orio (Guipúzcoa), Juan Priede.

       Los cuatro grupos municipales aprobaron una declaración institucional leída por el alcalde, Julio Revuelta, en la que lamentaban “la pérdida de una persona que decidió trabajar por su municipio desde la cercanía de los ciudadanos, con la idea sincera de servir a los vecinos”, “una labor despreciada e insultada por los violentos al convertirle en una nueva víctima de los fanáticos argumentos terroristas”. Los concejales, a través de este texto, se unieron al dolor de la familia y apelaron a la “confianza en el Estado de Derecho, en la Unidad y en el valor de la Democracia”.

       Una vez concluido el Pleno, se guardaron tres minutos de silencio en la Plaza del Ayuntamiento para condenar este nuevo atentado.