Logroño hace 90 años. Logroño en blanco y negro. Reflejos en acetato de las costumbres, la disposición de las calles y las plazas, las tradiciones y los monumentos de una ciudad que ya promocionó, a través de imágenes, su atractivo a principios del siglo pasado. Y es que en las primeras décadas del siglo XX existía una gran demanda de tarjetas postales, con las que promocionaban las ciudades.

        El Ayuntamiento ha adquirido para el Archivo Municipal un total de 27 clichés fotográficos con imágenes de Logroño captadas entre los años 1910 y 1920.

        Los negativos han sido adquiridos a una empresa valenciana por 3.765 euros, según explicó el concejal de Relaciones Institucionales, Javier García Turza.

        Los clichés, originales e inéditos en su mayoría, son negativos fotográficos en acetato, con medidas de 15 por 9,5 centímetros –las dimensiones habituales en la época–, y se han comprado “porque, entre otras cosas, en este momento hay escasa presencia de fotos de estos años en el Archivo”. En opinión de García Turza, “son imágenes que aportan gran cantidad de información sobre la época en temas como urbanismo, costumbres, antropología, tradición o monumentos”.

        Las reproducciones de algunos de los negativos comprados por el Ayuntamiento aparecen representados en unos pe-queños cuadernos de tarjetas, titulados 'Recuerdos de Logroño', de los que en la actualidad existe una copia en el archivo del Instituto de Estudios Riojanos. También es posible encontrar algunas reproducciones en la enciclopedia Espasa, donde sirvieron para ilustrar la voz ‘Logroño’; en concreto de las 20 imágenes utilizadas en la edición, siete proceden de los clichés comprados por el Ayuntamiento de Logroño.

        Los negativos han sido adquiridos a la empresa valenciana ‘Atril’, aunque originalmente fueron propiedad de la editorial barcelonesa de Josep Thomas, firma importante a principios del siglo XX en la edición de tarjetas postales. El análisis cronológico realizado por los técnicos municipales indica que “la mayoría de las imágenes son de los años 1910 a 1912, excepto una, de 1920 o 1922”; que se trata de imágenes inéditas, de las que hay 4; y los autores, “en su mayoría son desconocidos”, según detalló García Turza.

        En la colección de imágenes se pueden contemplar las iglesias de San Bartolomé, Palacio o La Redonda, la antigua estación del tren, una vista de la ciudad desde Pozo Cubillas, el antiguo Espolón, los Palacetes de Vara de Rey, el IES Sagasta, una vista de los puentes de hierro y de piedra, y la puerta sur de La Redonda. Aproximadamente dentro de tres meses las imágenes será presentadas en una nueva exposición sobre la ciudad a través del tiempo, tal y como se hiciera hace algunos meses con otros fondos fotográficos municipales, registrando una gran aceptación entre los vecinos logroñeses.