El pasado sábado fue de fiesta en La Estrella. Una auténtica fiesta deportiva organizada para celebrar la puesta de largo del nuevo campo de fútbol para el único de los barrios periféricos que no contaba con unas instalaciones de estas características. Una degustación, juegos infantiles y, por supuesto, un partido de fútbol, fueron parte de las actividades programadas para esta jornada.

Para abrir boca: un partido de fútbol.

El Ayuntamiento de Logroño ha invertido cerca de 600.000 euros en estas instalaciones, incluido el equipamiento. Unas instalaciones que cuentan con tres partes diferenciadas; el terreno de juego, de tierra, con medidas reglamentarias de 106 por 64 metros; un edificio de servicios con dos vestuarios para los jugadores, de 45 metros cuadrados cada uno; y otro para los árbitros, de 22 metros cuadrados. En esta zona también se ubica el bar, el botiquín, almacenes y aseos; todo ello preceptivamente adaptado para personas con minusvalía.

Foto de familia, en el estreno de las instalaciones

El tercer espacio se dedica a la urbanización general de la zona deportiva, que incluye un aparcamiento para una veintena de vehículos, accesos y zonas verdes.
El terreno de juego, en el que se han instalado cuatro torretas de iluminación de 16 metros de altura con cuatro proyectores cada una, se ha construido para la futura instalación de cualquier otra superficie (hierba artificial, por ejemplo).
       
Una agradable jornada
Más que primaveral, pudo denominarse esta mañana de sábado en la ciudad, en el campo de fútbol de La Estrella.

El alcalde, Julio Revuelta, entrega los trofeos a los participantes.

Asistió mucho público, además, animado por el buen tiempo y por el partido organizado para la ocasión. Los chavales del equipo del barrio, que invitaron al C.D. Varea, disputaron este encuentro, en el que el resultado fue lo de menos. Al final hubo reparto de trofeos, medallas y nutrida presencia de responsables municipales, encabezados por el alcalde, Julio Revuelta; así como de otros deportistas como el cuerpo técnico y algunos jugadores del Club Deportivo Logroñés. Al final hubo foto de familia, como apreciamos en esta página, que servirá como punto de partida para un campo de fútbol llamado a albergar numerosas tardes de emoción y práctica deportiva.