Poner en marcha una iniciativa nueva para la ciudad genera siempre un sentimiento de alegría y satisfacción. Una sensación que se incrementa cuando un determinado proyecto se realiza, además, de la mano de un colectivo ciudadano que participa con ilusión y ambición, proponiendo un proyecto
interesante y atractivo. Es el caso de la Plaza de Abastos y del concurso convocado por el Ayuntamiento para dinamizar la tercera planta del mercado.
La Asociación de San Blas ha mostrado su determinación a implicarse en el proyecto, al igual que la Cámara de Comercio. De esta colaboración estoy convencido de que se beneficiarán comerciantes, el Casco Antiguo y los logroñeses, pero también aquellas personas que nos visitan y que encontrarán en el mercado un elemento de referencia del ocio y la cultura de la ciudad, al tiempo que mantiene su condición de escaparate de los mejores productos de nuestra región.