El alcalde destaca en la inauguración del Paseo Carlos Fernández Casado “el merecido homenaje que Logroño tributa a un referente de la ingeniería y el humanismo”

El alcalde de Logroño, Conrado Escobar, junto a otros miembros de la Corporación municipal, ha inaugurado esta mañana el nuevo Paseo Carlos Fernández Casado. En el acto han participado también familiares del homenajeado, que han recibido una réplica de la placa de esta nueva vía de la ciudad, que nace de la urbanización del PERI Portillejo II, en el entorno del Parque San Miguel.
“Este es el merecido homenaje que Logroño tributa a uno de sus vecinos ilustres, un referente de la ingeniería y también destacado humanista con estudios en varias disciplinas”, ha destacado el alcalde.
La figura de Fernández Casado ha sido glosada por la responsable del Archivo Municipal y cronista académica de la ciudad, Isabel Murillo, quien ha recordado las propias palabras del ingeniero al asegurar que los puentes fueron “el eje de su vida” y que en su infancia, desde los puentes de Piedra y de Hierro “primero de la mano y después solo” contempló “con vértigo el paso del río en avenidas”, marcando así su cimiento profesional.
Carlos Fernández Casado nació en Logroño el 4 de marzo de 1905 en la calle Muro del Siete, actualmente Muro de Cervantes, en el seno de una familia numerosa. Vivió en la capital riojana hasta los 10 años, para trasladarse posteriormente a Madrid debido a la profesión de su padre, militar.
Realizó estudios de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos y fue uno de los proyectistas más importantes del siglo XX, tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Considerado una referencia de la ingeniería civil española, fue uno de los introductores y desarrolladores de la técnica del hormigón pretensado en España.
Entre sus obras destacan la Facultad de Filosofía en la Ciudad Universitaria de Madrid, el Puente de Puerta de Hierro sobre el río manzanares y el ‘Salto de la Retorna’, un aprovechamiento hidroeléctrico de un tramo del río Najerilla. También, en Logroño, el paso sobre el ferrocarril en la calle Vara de Rey.
Fernández Casado fue miembro electo de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, y además de a su faceta profesional se dedicó a la docencia, los estudios históricos, los estudios de teoría de la ingeniería y filosofía, así como a la elaboración de varias publicaciones. Falleció en 1988.
La ciudad de Logroño le homenajeó con exposición y placa por dos ocasiones, en 1984 y 2009.