El Centro de la Cultura del Rioja acoge la exposición permanente ‘La Familia del Vino’, una muestra fotográfica única que rinde homenaje a quienes han hecho posible el prestigio de Rioja

El Centro de la Cultura del Rioja acoge la exposición ‘La Familia del Vino’, una muestra única que ofrece un relato inédito y rinde homenaje a los agricultores, bodegueros y trabajadores que han hecho posible el prestigio de Rioja a nivel internacional.
El alcalde de Logroño, Conrado Escobar, el concejal de Promoción de la Ciudad, Miguel Sainz, y el comisario de la muestra, Jesús Rocandio, han presentado esta mañana esta exposición, de carácter permanente.
“La Rioja posee una de las mejores colecciones del mundo sobre fotografía histórica del vino. Se trata de un legado muy valioso que ahora podemos descubrir con esta exposición única que nos acerca a los orígenes de lo que hoy es una marca y un producto de merecida fama mundial”, ha destacado el alcalde.
Escobar ha añadido que “con esta primera exposición permanente, el Centro de la Cultura del Rioja refuerza su papel como espacio de referencia para la difusión del vino y su historia. Una experiencia inmersiva y didáctica, pensada tanto para amantes del vino como para quienes deseen descubrir por qué Rioja es lo que es hoy”.
El arco temporal de esta exposición abarca desde finales del siglo XIX hasta las primeras décadas del siglo XX.
La expansión del vino de Rioja y el auge de la fotografía coincidieron en el tiempo, permitiendo capturar de manera inédita la evolución de la relación entre las personas y la tierra. Desde finales del siglo XIX, las bodegas riojanas, demostraron un espíritu visionario al documentar cada aspecto del proceso vitivinícola: la construcción de calados y almacenes, la vendimia, la vinificación y, sobre todo, a los trabajadores que lo hicieron posible.
Este legado excepcional ha sido cuidadosamente preservado por generaciones y, gracias a la unión de los archivos fotográficos de múltiples bodegas, hoy podemos ofrecer un testimonio inédito de la creación de uno de los vinos más reconocidos del mundo a través de esta exposición con imágenes tomadas en su mayoría entre 1880 y 1920.
Esta es la primera vez que se cuenta la historia completa de cómo se obtenían vinos de alta calidad, en una muestra integrada por 110 fotografías. Para ello, la exposición nos sumerge en este rico patrimonio documental sobre soporte fotográfico que se atesora en las bodegas centenarias de Rioja.
De la llegada de los franceses a partir de 1860, pasando por la aparición de la filoxera en 1899, el desfondado de los campos para acabar con la plaga, las nuevas plantaciones con injertos de pie americano, el cultivo de la viña, la vendimia, la vinificación, el envejecimiento, el embotellado, etiquetado, embalado y expediciones del producto en carros o los primeros camiones. Todo ello está reflejado en esta exposición, en la que el eje del relato son las personas: bodegueros, trabajadores, agricultores, no solo poniendo énfasis en coincidencias o diferencias, sino también en su pertenencia a una familia común: la familia del vino.