El soterramiento no se puede parar
El soterramiento no se puede parar
La historia de Logroño recordará el primer cuarto del siglo XXI con un hito urbanístico: el soterramiento del ferrocarril. El cambio de milenio permitió a la ciudad dar un salto cualitativo hacia la modernidad con el proyecto de integración del tren comandado por las tres administraciones. El objetivo era claro: cerrar la herida ferroviaria que no paraba de supurar con la expansión residencial hacia el sur.Ahora, tras más de dos décadas, la transformación es un hecho. Una gran estación intermodal, el parque Felipe VI o nuevas conexiones viarias y peatonales han cerrado la brecha entre el barrio de Cascajos y el centro de Logroño. Sin embargo, queda rematar la urbanización de la fase I y completar la venta de los terrenos donde estaban previstas 1.200 viviendas.Pero en el Partido Riojano no olvidamos que, aunque se liquiden estos asuntos pendientes, la herida del ferrocarril sigue supurando en otras zonas de la ciudad. Es por ello que urgimos a zonas de la ciudad. Es por ello que urgimos a desbloquear la fase III del soterramiento, entre Vara de Rey y Duques de Nájera, a completar el cubrimiento del trazado en Los Lirios y a procubrimiento del trazado en Los Lirios y a procubrimiento del trazado en Los Lirios y a prolongar el cajón ferroviario entre Baltasar Gracián y Tirso de Molina si no queremos condenar al resto de los ciudadanos a convivir con una trinchera que no es segura ni favorece la conectividad de una ciudad propia del siglo XXI. Proyectos que deben quedar liberados este 2024.