Imagen de la rueda de prensa
08.10.2024

El presidente de Logroño Deporte, Francisco Iglesias, ha visitado esta mañana las piscinas del Centro Deportivo Municipal de La Ribera, después de haberse realizado el cambio del actual sistema de tratamiento del agua de las piscinas a un nuevo sistema de cloración salina mediante electrolisis, lo que incrementa la calidad del agua y supone un notable ahorro en su desinfección. El Ayuntamiento ha llevado a cabo estos meses una intensa labor de mejora y mantenimiento, además de diferentes reparaciones, en algunas de las instalaciones deportivas municipales de la ciudad.

Como cada año, el Ayuntamiento de Logroño ha aprovechado el periodo estival para llevar a cabo trabajos de mejora y mantenimiento de las diferentes instalaciones de Logroño Deporte, con el objetivo de que “los usuarios las disfruten en las mejores condiciones de cara al inicio de las actividades y cursos incluidos en el Programa deportivo municipal”, ha indicado Iglesias.

En concreto, las labores de mantenimiento de estos meses se han centrado en diferentes instalaciones y han supuesto una inversión global de 107.881,24 euros. Una de ellas ha sido la adecuación de la piscina y pared frontal del balneario del Centro Deportivo Municipal de Lobete y la reparación de una grieta en el vaso de la piscina de natación de Lobete, en ambos casos, “se trata de unas averías que surgieron coincidiendo con el cierre y hubo que intervenir sobre ellas por valor de 12.137 euros”, ha asegurado el edil. Iglesias ha explicado que también se ha llevado a cabo la renovación de la sala de musculación de Lobete, en la que se han instalado 32 pantallas LED, espejos y vinilos, por un coste de 20.744,24 euros euros.

Asimismo, ha informado Iglesias, “otra de las principales actuaciones llevadas a cabo durante este verano ha sido el cambio del actual sistema de tratamiento del agua de las piscinas del Centro Deportivo Municipal de La Ribera a un sistema de cloración salina mediante electrolisis, además, de la instalación de sistemas ultravioletas para obtener un agua con unos parámetros de calidad idóneos”.

Según los datos del concejal, “este procedimiento, cuya inversión ha sido de 75.000 euros, permitirá tener un agua similar a la del mar, gozando de una mejor calidad de la misma para el baño”. También, ha añadido, “supondrá un ahorro en la compra de productos higiénico-sanitarios para el tratamiento del agua de piscina; al ser la sal, más barata que el hipoclorito”.

Desinfectar el agua mediante sal natural

Uno de los sistemas de desinfección para el tratamiento del agua de la piscina más utilizados en los últimos años es el de la electrólisis salina. Este tratamiento consiste, como puede deducirse de su propio nombre, en simular el comportamiento del mar en una piscina de forma artificial. Básicamente, lo que se hace es desinfectar el agua mediante sal natural y no cloro químico.

Iglesias ha señalado que “hemos instalado un nuevo clorador salino, o también llamado sistema de electrólisis salina, en el sistema de depuración de la instalación acuática, de forma que mediante la aplicación de una corriente eléctrica continua se consigue destruir todos los microorganismos como bacterias, algas, hongos, ya que convierte el agua salada en cloro natural hipoclorito sódico”.

Cuando el cloro producido ha cumplido su función de desinfectar, se vuelve a convertir en sal, por lo que la concentración de sal permanece constante. Este proceso es lo que se llama electrólisis. La cantidad de sal en el agua de la piscina es similar a la existente en una lágrima del ojo humano, por lo que no afectará ni a la piel, ni a los ojos.

Además, “la luz ultravioleta se considera la mejor tecnología disponible para la desinfección de piscinas”, ha expresado el concejal. Los estudios muestran que en la desinfección química, el 90% de los productos químicos se utilizan para la oxidación y el 10% para la desinfección. La luz ultravioleta hace ambas cosas sin usar productos químicos extra.