Te voy a dar donde más te duele
Te voy a dar donde más te duele
Estos días han sido especialmente duros. El estremecedor caso de las niñas de Tenerife ha puesto de nuevo el foco en la peor cara del machismo: la violencia vicaria. Este tipo de violencia supone el uso de los hijos e hijas por parte del agresor como herramienta para hacer daño a la madre, siendo la cara más extrema de la desigualdad. “Te voy a dar donde más te duele” fue la frase con la que el padre de las niñas amenazó a su exmujer y madre de sus hijas, antes de asesinarlas. Algo estamos haciendo mal como sociedad y necesitamos cambiarlo ya. Para empezar, es imprescindible que los responsables públicos tengan claras las líneas rojas que no se pueden traspasar. Porque es inasumible que en pleno siglo XXI sigan pasando estas cosas. Pero más inasumible es que un partido firmante del Pacto de Estado contra la Violencia de Género sea cómplice de los que niegan la violencia machista. No es compatible tener de socios de gobierno a la ultraderecha negacionista y a la vez guardar un minuto de silencio en la plaza del Ayuntamiento por unas víctimas utilizadas por los ultraderechistas para difundir sus discursos del odio. No es tolerable ni democrático que el Partido Popular diga que denuncia la violencia machista y luego se ponga junto a quien la niega públicamente