Desde 1995, el Ayuntamiento de Logroño, a través de la Unidad de Infancia y Juventud, desarrolla el Programa de ‘Becarios en Puntos de Información en Institutos’. Una iniciativa que deriva del anterior Programa de Enseñanzas Medias, en funcionamiento desde 1989, en el que ya se daba una especial importancia al desarrollo de la información juvenil.

        Durante el curso pasado se trabajó especialmente en la dinamización de la información que llega a los centros a través de los distintos departamentos; así como en el acercamiento a esta información disponible en el Servicio de Asesoría y Apoyo Juvenil, atendiendo a las características y demandas de las personas a las que se dirige.

        El pasado mes de septiembre, la Comisión de Gobierno aprobó las bases para la concesión de las ayudas a los estudiantes para la dinamización de los Puntos Informativos en los Centros de Enseñanza, registrándose hasta la fecha señalada como plazo un total de diez proyectos, pertenecientes a otros tantos centros de enseñanza. En concreto, estos I.E.S. son el Tomás Mingot, el Batalla de Clavijo, La Laboral, Comercio, Práxedes Mateo Sagasta, Inventor Cosme García, Escuela de Arte, Compañía de María, Hermanos D´Elhuyar y Escultor Daniel. Proyectos que han sido resueltos con el dictamen favorable de la Comisión de Gobierno celebrada el pasado miércoles. En este mismo acuerdo municipal, se contempla la concesión global, por importe de 1.160.000 pesetas, a veintinueve estudiantes pertenecientes a los centros educativos mencionados. Tal y como se recoge en el expositivo del acuerdo de la Comisión de Gobierno, los beneficiarios de las becas se comprometen a cumplir las funciones establecidas en los respectivos proyectos y a presentar una memoria-evaluación a final de curso escolar 2001-2002, en el que se detallarán todos los aspectos concernientes al funcionamiento de los Puntos de Información.

        Una experiencia positiva

        La memoria de esta actividad, referida al año 2000, recoge una estimación positiva de la experiencia, además de indicar que los becarios de cada instituto elaboraron evaluaciones mensuales, en las que se reflejaron todos los aspectos que intervienen en el proceso de información. Al finalizar la intervención, cada grupo de becarios elaboró una evaluación general de todo el periodo.

        Los becarios se organizaron de manera rotativa en la atención de los Puntos de Información; decidiendo la mayoría de los equipos repartir y compartir las funciones y responsabilidades. Los horarios de dedicación se correspondieron con los recreos de cada instituto, aunque en algunos casos se acudió a los Puntos de Información por las tardes, para el desarrollo de algunas tareas específicas. Además de las actividades y campañas habituales, los becarios de los Puntos de Información colaboraron en la organización de distintas fiestas, como las de Santo Tomás, Navidad, Primavera, viajes de fin de curso, campañas solidarias y otros programas de interés para su desarrollo por parte del alumnado.

        Información y servicio

        Datos referentes a esta misma memoria, indican que la información más solicitada fue la referente a educación, con datos sobre universidades, carreras disponibles, alojamientos en el lugar de estudios, posibilidades profesionales y salidas a las distintas carreras...; concursos, actividades extraescolares, tiempo libre y becas de estudio también tuvieron su protagonismo entre los estudiantes. En definitiva, información de utilidad y de servicio para las jóvenes a los que se dirige, para cuya difusión se emplearon distintos medios aunque los más tradicionales –caso del tablón de anuncios, complementado con la colaboración de los delegados de curso y el profesorado– siguen manteniendo su vigencia y efectividad a la hora de informar al alumnado.