El concejal de Vialidad del Ayuntamiento de Logroño, Alberto Guillén, presentó el pasado martes el proyecto de urbanización de la Plaza de la Primavera y la calle Pepe Eizaga, que tendrá un coste de 1.027 millones de euros y cuyo desarrollo se coordinará con los trabajos correspondientes a la construcción del propio aparcamiento subterráneo que se realiza en el lugar, con capacidad para 317 plazas.

 Dicha infraestructura y las futuras necesidades de acceso rodado y peatonal; así como la configuración estancial de esta superficie, aconsejan una ruptura de usos y un distinto tratamiento urbano, tendente a criterios lúdicos y estéticos. Con el fin de buscar una continuidad entre espacios contiguos, la urbanización se extiende a la calle Pepe Eizaga.

        Acceso al aparcamiento

 La calle Pepe Eizaga se propone como acceso principal al aparcamiento. En la zona colindante con la calle Pérez Galdós se ubicará tanto una rampa de entrada y salida para vehículos como el acceso peatonal, con escaleras y un ascensor cuya parte visible se revestirá de cobre oxidado y que se coronará con un tubo de metacrilato iluminado, como una farola más.

 Para la entrada de vehículos se ha proyectado un trayecto con doble curva con el objetivo de hacer más permeable el acceso peatonal a la plaza, alejando su trazado de los edificios e invitando a su tránsito; se forma una solución de embudo que facilita el paso hasta un espacio que pierde el carácter lineal de la calle Pepe Eizaga para convertirse en una pequeña plaza en la que destacará un primer espacio semicircular que cobijará una estancia entorno a una fuente.

 También se establece un segundo acceso rodado, secundario y sólo de salida, entre la Plaza de la Primavera y la calle Chile.

En cuanto a los accesos peatonales –además del principal, ubicado entre Pepe Eizaga y Pérez Galdós– se incluyen otros dos secundarios que se utilizarán solo mediante escaleras. El primero de ellos se ubicará entre la calle Chile y la Plaza de la Primavera; y el otro entre Pepe Eizaga y la Plaza Primero de Mayo.

        Un cuidado aspecto

 La urbanización contempla la instalación de chimeneas de ventilación disimuladas con la colocación de arbustos. En la zona se colocará nueva pavimentación, con adoquín ‘stradalit’ para el tráfico rodado, mientras que el resto de la zona se revestirá con granito similar al de otros puntos de la ciudad.

 También se ha previsto la instalación de 31 nuevas farolas del modelo ‘Logroño’ a dos alturas; 23 jardineras con arbustos y la plantación de árboles de poco porte en zonas como la confluencia de Pepe Eizaga y la Plaza de la Primavera. Los accesos al aparcamiento se terminarán con barandillas de acero y vidrio.

 El concejal destacó el profundo cambio de la configuración de la zona, “modificando completamente su carácter”. La previsión apunta a la finalización de estos trabajos para mayo de 2003.