El Partido Popular sigue ciego, sordo y mudo ante lo que está siendo el mayor clamor popular de los últimos años en nuestro país contra una guerra injusta e ilegal en la que se están cumpliendo las peores previsiones y se está convirtiendo en una auténtica masacre contra el pueblo iraquí.

Millones de personas en las calles, huelgas de estudiantes, movilizaciones de los trabajadores…. La inmensa mayoría del pueblo español está hablando alto y claro para parar esta guerra que ya ha provocado miles de muertos y heridos por los que algún día deberían responder ante los tribunales internacionales los tres nuevos jinetes del apocalipsis: Bush, Blair y Aznar.

Ante esta situación, la única respuesta del Partido Popular, incapaz de condenar esta infamia, es criminalizar a los manifestantes, restringir la libertad de expresión y poner trabas para que la ciudadanía pueda expresar su condena e indignación.

En Logroño, hemos asistido a las mayores manifestaciones de los últimos años contra una guerra que no ha sido capaz de condenar ningún cargo público del PP en Logroño o en La Rioja.

La respuesta del PP deja a las claras su auténtica cara autoritaria:

Brutal y deproporcionada carga policial en pleno centro de Logroño contra un grupo reducido de personas que sólo pretendían manifestarse contra la guerra y por la paz.

Retirada ilegal de pancartas contra la guerra que estaban situadas en la ventana del Grupo Municipal de Izquierda Unida.

La última muestra de la "sensibilidad" del PP es su negativa a convocar un pleno extraordinario urgente para debatir una condena a la guerra del Ayuntamiento de Logroño que, finalmente, no tendrá más remedio que convocar, obligado por ley y que intenta retrasar y realizarlo a una hora en la que no puedan acudir los ciudadanos de Logroño, a los que se supone que debe representar su Ayuntamiento.

En este Pleno, los grupos de la oposición vamos a solicitar una votación individual para que todos y cada uno de los concejales del Partido Popular decidan si condenan o apoyan esta guerra imperialista y criminal. No condenar esta guerra es ser cómplice de ella.

Desde Izquierda Unida vamos a seguir trabajando, no sólo en la movilización para parar esta guerra, sino para que todos aquellos que la no la condenan paguen políticamente por ello. ¡NO EN NUESTRO NOMBRE! ¡NO CON NUESTRO SILENCIO! ¡PAREMOS LA GUERRA! ¡GOBIERNO DIMISIÓN!

        Grupo Municipal de Izquierda Unida