Historia de la Ciudad
De ayer a hoy
Su topónimo procede de "GRONIO", raíz celta que significa vado, y hace referencia a su nacimiento junto a un vado en el río Ebro. La primera mención documental a Locrunio es del año 956, cuando la villa es donada al Monasterio de san Millán de la Cogolla por el monarca García Sánchez de Navarra.
Antes de eso hubo emplazamientos en el actual término municipal: el asentamiento celtíbero del Monte Cantabria y la "Vareia" de los romanos. Esta última es citada por los geógrafos antiguos como uno de los enclaves en la vía que, procedente de la península itálica, llegaba hasta el occidente de España. Varea era un núcleo de vital importancia debido a la condición del Ebro como río navegable en algunos de sus tramos.
Dos hechos configuran la ciudad durante la Edad Media: el Camino de Santiago cruzaba por ella y su situación fronteriza entre los reinos de Castilla y Navarra.
La ciudad fue arrasada por el Cid Campeador en el año 1092, fruto de su rencilla particular con García Ordóñez. Alfonso VI fue el artífice de su restauración tres años más tarde, con el otorgamiento del Fuero de Logroño que contemplaba mejoras tributarias y libertades personales para sus habitantes con el objetivo de incrementar la población de la urbe. El fuero de Logroño es cabeza de una gran cantidad de fueros en Castilla, Rioja, País Vasco y Cantabria.
A partir del siglo XI, Logroño se convierte en una ciudad fuerte y privilegiada por su situación geográfica. Es un enclave afortunado tanto en el aspecto económico como en el cultural, por la proximidad al Ebro y por la decisión del rey Sancho de Navarra de hacer pasar por Logroño el itinerario de los peregrinos hacia Compostela, la ruta de comunicación más importante de la Europa medieval. Ya por aquel entonces, el territorio riojano era un centro de influencia de primer orden gracias a sus monasterios y a figuras como San Millán de la Cogolla, Santo Domingo de la Calzada y Gonzalo de Berceo.
En los siglos XV y XVI destacan varias fechas de importancia para Logroño: el año 1431, cuando el rey Juan II de Castilla le honra con el título de ciudad y 1444, con los títulos de "Noble" y "Leal", sin que tengamos constancia fehaciente de la data y motivo del otorgamiento del "Muy", en todo caso entre 1444 y 1519, que hace que Logroño sea "Muy Noble" y "Muy Leal". En 1521, los logroñeses protagonizaron uno de los episodios más épicos y recordados de nuestra Historia: la resistencia a las tropas francesas, con algún aporte de navarros, que tras tomar Navarra atacaron y pusieron cerco a Logroño.
Treinta mil soldados según crónicas de la época (ocho mil según muy recientes estudios) comandados por el General Asparrot sitiaron la ciudad. Según las mismas crónicas, el cerco comenzó el 25 de mayo (fecha que puede retrasarse hasta los primeros días de junio), siendo el licenciado Villegas corregidor y el capitán Vélez de Guevara el encargado de organizar la defensa. Las crónicas cuentan también que se convocó junta general de la ciudad en la Iglesia de Santiago que mandó a Asparrot la siguiente misiva: 'Logroño no abrirá sus puertas al enemigo, interim uno de sus habitantes tenga vida para combatir. Nos defenderemos hasta la muerte'. El 11 de junio el cerco quedó levantado, siendo el origen de las fiestas locales de San Bernabé a través del voto realizado por la Justicia y Regimiento de la ciudad.
Poco a poco el núcleo urbano de Logroño fue creciendo, rompiendo murallas y aumentando su población. Se construyeron iglesias, edificios, plazas, paseos, comercios...La ciudad fue consolidando como referente de la provincia. Ya en 1833 se convierte en capital de provincia, la denominada Provincia de Logroño, aunque no sería hasta los años treinta del siglo XX cuando superó los treinta mil habitantes.
Desde 1982 Logroño es capital de la Comunidad Autónoma de La Rioja, la menor de las 17 Autonomías españolas, pero situada en uno de los primeros lugares de renta "per cápita" dada su riqueza agrícola e industrial.
En cuanto a personajes importantes debemos destacar al general Baldomero Espartero; el hombre que pudo ser rey, fijó su residencia en Logroño durante gran parte de su vida y aquí murió en 1879. Se conserva su estatua ecuestre en el centro del Espolón y su palacio residencia (actual Museo de La Rioja).
La ciudad ha dado escritores como el dramaturgo Manuel Bretón de los Herreros y el guionista Rafael Azcona y figuras en él ámbito científico como los hermanos D'Elhuyar, descubridores del wolframio, el ingeniero Cosme García que desarrolló un prototipo del primer submarino y el oftalmólogo Ramón Castroviejo.
Logroño ha sabido conservar con orgullo su pasado histórico sin frenar su desarrollo hacia el futuro. Junto a un recuperado Centro Histórico, la urbanización reciente está dotada de amplias calles, avenidas, parques y jardines. Además, es una ciudad de grandes servicios y posibilidades para el ocio y el tiempo libre.
El Fuero de Logroño. Situación y razones que originaron el Fuero. La nueva "puerta" de Castilla
Con Alfonso VI, Logroño, al igual que Nájera, pasaría a pertenecer a la corona de Castilla. En ese moemento (segunda mitad del siglo XI) Nájera era un emplazmianto de mayor importancia que Logroño, tanto por su antigua condición de corte navarra, como por la presencia del Monasterio de Santa María la Real y su posición clave en la Ruta Jacobea.
Sin embargo, el rey Alfonso VI decide realizar una reorganización territorial y traslada al entonces burgo de Logroño el peso político de la zona, especialmente por motivos estratégicos y defensivos. Es importante favorecer la repoblación de este territorio que garantice la defensa de toda la comarca y del tramo riojano de Camino de Santiago, convirtiéndose de esta forma, en ciudad-frontera clave en el paso del Ebro y baluarte ante Navarra y Aragón.
Para ello decide otorgar a la ciudad un Fuero cuyo objetivo fundamental es incrementar la población mediante la concesión de beneficios a los habitantes. Se pretende así constituir un núcleo urbano sólido que además desarrolle una importante actividad comercial.
Su posición geográfica y este ordenamiento jurídico serán las bases sobre las que se desarrolle el Logroño medieval.
¿Qué significa el Fuero de Logroño?
Algunos de los aspectos más destacables de este Fuero son:
- La donación a la ciudad de terrenos, dotando al mismo de un amplio alfoz, -conjunto de poblaciones dependientes y sujetas a su misma ordenación-, a ambos lados del río.
- El libre aprovechamiento de aguas, pastos y cultivos.
- La garantía de propiedad de las tierras ocupadas por la simple tenencia de un año y un día.
- Se permite la venta y la compra de propiedades a sus habitantes, dentro y fuera de la villa, sin carga señorial alguna.
- Se favorecen las actividades comerciales.
- El otorgamiento de rango de ciudadanía a los francos, - es decir, los extranjeros (caso habitual son los ciudadanos franceses) -, asentados en la ciudad, lo que implica un extraordinario grado de modernidad.
- La resolución de los trámites procesales en la villa por jueces locales.
El Fuero hace también referencia a la organización del gobierno de la villa y a su capacidad defensiva.
Historia de la vendimia riojana y San Mateo
Las fiestas de San Mateo son el resultado del extraño mestizaje entre la época medieval y la cosecha del vino.
Logroño tenía el privilegio de celebrar aquí una feria anual. De este modo se convirtió en una sede importante de comercio. Dichas ferias fueron adquiriendo mayor relevancia y aumentaron en frecuencia.
Durante la celebración de estas ferias iba ganando importancia el carácter festivo y divertido de ellas. Es así como el vino, fruto de la tierra riojana se introduce en los mercados medievales de la villa logroñesa.
La Feria más importante tenía lugar el día de Acción de Gracias, en septiembre. Los riojanos agradecían la cosecha recogida. La feria fue fijada para la tercera semana de septiembre coincidiendo con el día 21, San Mateo, santo que había sido recaudador de impuestos y convertido en patrón de los mercaderes. Estas fiestas representan también el punto de partida de la vendimia.
Hoy en día, las fiestas de San Mateo y de la Vendimia son las más multitudinarias de La Rioja. En estos días los riojanos ofrecen los frutos de la cosecha y el primer mosto a su patrona, la Virgen de Valvanera y celebran el inicio de la vendimia pidiendo a la Virgen que el resultado de ésta sea excelente.