Se suele decir que la mayoría absoluta acaba provocando situaciones de abuso, prepotencia e impunidad. En el caso del Partido Popular en Logroño, todo esto va unido también a grandes dosis de incompetencia y desfachatez. En los últimos días hemos tenido varios ejemplos que ilustran mejor que cualquier discurso la actual realidad de este equipo de Gobierno en el Ayuntamiento y su “sensibilidad” a la hora de abordar la gestión de nuestra ciudad.
De su desprecio por el patrimonio histórico cultural y artístico
de Logroño ya teníamos sobradas noticias, sobre todo, cuando de
por medio surge la posibilidad de especular con el suelo y favorecer
los intereses de las grandes constructoras e inmobiliarias, pero
su actuación en torno al derribo y desaparición de la Puerta de
Santa Juliana ha superado los límites de lo admisible.
La desfachatez y prepotencia con la que se ha pretendido cerrar este caso en el Pleno del Ayuntamiento, con un pequeño “tirón de orejas” a sus amigos de SODETUR y la imposición de una multa de ¡25.000 pesetas! por realización de “obras sin permiso”, además en su grado mínimo, cuando estamos ante el derribo un elemento protegido deja bien a las claras cual es la sensibilidad cultural del PP.
La tala indiscriminada de árboles en la calle Duquesa de la Victoria
es otro ejemplo de cómo esta derecha autoritaria pretende entrar
como elefante en cacharrería, acabando con cualquier elemento
de identidad en nuestra ciudad.
Por último, la sensibilidad del PP hacia los problemas de los
vecinos de Logroño se ha puesto también de manifiesto en la Zona
Oeste de nuestra ciudad, dejando en la calle a centenares de personas
mayores que se han quedado sin un lugar en su barrio al que acudir
a disfrutar de su tiempo libre, mientras duren las obras en el
Hogar del Jubilado.
Estos son sólo algunos ejemplos, pero de lo que no se dan cuenta es que toda esta prepotencia se acaba pagando.
Grupo Municipal de Izquierda Unida
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