La conservación del Patrimonio de Logroño es ya una prioridad para el Ayuntamiento. Quizá pueda parecer increíble que esta determinación pueda ser noticiable –más cuando parece obvio que así debiera ser en esta ciudad y en cualquier lugar del mundo-, pero así es. Desde las responsabilidades de Gobierno que hemos asumido en materia de Patrimonio y Casco Antiguo, en el Partido Riojano consideramos irrenunciable en el desarrrollo equilibrado de Logroño el respeto por todos aquellos elementos arquitectónicos, artísticos, culturales, etc, que articulan nuestra Historia y nos permiten reconocer la evolución, el progreso y la transformación de nuestra ciudad a lo largo de los siglos. La lógica y deseable modernización de los servicios y dotaciones en ningún caso precisa de la destrucción del pasado; muy al contrario, sugiere su convivencia. Nuestro Patrimonio es además una pieza esencial en las políticas de Promoción de la Ciudad; es decir; en el empeño de que Logroño sea cada día más atractiva e interesante.

        Desde ese convencimiento, una de las primeras acciones que hemos emprendido desde el equipo de Gobierno ha sido el inicio de conversaciones encaminadas a tratar de preservar una serie de edificios e infraestructuras que ya contaban con fecha de caducidad. ‘La Casa de las Tetas’, Maristas, los antiguos depósitos del parque de los Enamorados, el edificio del actual estación del ferrocarril o los calados y lagares. Sin duda, merece la pena.