Es una planta de exterior que soporta cualquier clima, aunque en climas fríos se comporta como anual o bianual, mientras que en climas cálidos, es perenne.
Puede servir de planta de interior.
Altura: 30 cm.
Planta muy compacta y regular.
Hojas lanceoladas o elípticas, las Inferiores y las medias opuestas.
Ramilletes de flores plumosas.
Los colores que podemos encontrar en el mercado son: azules de varios tonos, violáceas, blanco y rosa.
Época de floración: desde primavera hasta fines de otoño.
Se obtienen actualmente gran cantidad de híbridos muy utilizados en jardinería.
Ideal para borduras bajas.
Aptas para macetas en terrazas y balcones.
Las flores sirven también como flor cortada.
La distancia de plantación entre estas plantas es de 30 cm.
Luz: al sol y a media sombra. En los lugares más cálidos, vive mejor en la sombra. Protege de los rayos del sol más potentes.
Resistencia al frío: escasa; no resiste temperaturas inferiores a 3-4°C. Es importante no colocarlas en exterior hasta que pasen las heladas.
Requiere suelos sueltos, que se mantengan húmedos.
Suelo bien drenado.
En zonas húmedas o muy lluviosas, puede usarse como planta de interior.
Fácil cultivo en diferentes condiciones. Es muy resistente y dura mucho.
Regar cada 2 días en verano y semanal en otoño. Necesita riegos muy frecuentes en verano.
Abonar durante el periodo de floración con un fertilizante añadido al agua de riego.
Hay que abonar las matas en cuanto se vea que las flores empiezan a marchitarse.
Se deben eliminar las flores marchitas, para asegurar una floración continua.
Si en el verano se interrumpe la floración, pódela algo para que vuelva a florecer de nuevo.
Sensible a moscas blancas.
Multiplicación: por semillas. Siembre en semillero a final del invierno o principios de primavera. Germina en 15-20 días a 22-24ºC.